ORIENTACIONES
PARA LA ESTIMULACIÓN DEL LENGUAJE EN NIÑOS/AS DE EDUCACIÓN INFANTIL
El lenguaje oral es una
función y una destreza que se aprende de forma natural, por una serie de
intercambios con el entorno social .
La adquisición del lenguaje es
un proceso evolutivo que sigue su propio ritmo y curso. Estos no son iguales en
todos los niños.
Que tu hijo o tu hija
pronuncien y articulen bien los sonidos, depende, en gran medida, de que
vosotros, como madre y padre, ofrezcáis unos modelos correctos de
pronunciación. En el control de la articulación interviene decisivamente el
oído, la respiración, el soplo y la capacidad de movilidad de los órganos
bucofonatorios (lengua, labios, paladar...).
A continuación os presento una
serie de orientaciones para la estimulación del lenguaje de vuestros hijos:
- Háblale despacio y de forma clara.
- Habla a tu hijo tan a menudo como sea posible.
- Háblale
correctamente y no imites su forma de hablar, no uses diminutivos
ni palabras infantiles.
- No le atosigues porque te parezca que va lento, cada cual
tienen su ritmo de pronunciación.
- Dale tiempo para que responda a tus preguntas.
- Señala o marca turnos de intervención del niño. Intenta
que tu hijo respete los turnos de comunicación.
- Repítele todo las veces que lo necesite, pero siempre de
forma natural.
- No
corrijas inmediatamente las producciones erróneas del niño. Utiliza esa palabra
en una frase para que la escuche bien dicha. (Ejemplo: si el dice “el pero ladra” y se le pude decir “el perro que juega con ese niño ladra muy fuerte”).
- No intentes corregir los errores fonológicos del niño
(eso es labor de la maestra), limítate a que el niño te oiga correctamente y
comprenda lo que quieres decir.
- Adapta la longitud de tus enunciados a la capacidad del niño.
- No reírse nunca de
los errores fonológicos cometidos por el niño.
- Intenta que tu hijo sienta que le comprendéis, haz
esfuerzos por comprenderle y que el niño no se sienta frustrado.
- Siempre que el niño inicie una conversación intenta que
esta se mantenga el mayor tiempo posible.
- Si
le cuesta utilizar correctamente alguna de las partes de la oración o las
construye mal, ofrécele el modelo correcto, pero tomando aquello que ha dicho y
repitiéndoselo correctamente.( Ejemplo: si el dice “¿es su coche de su papa?” se le diría: “Si, es el coche de su papá.”
- Da
“la vuelta” a sus preguntas animándole a pensar y a manifestar sus opiniones (
Ejemplo:¿ por qué......? ¿ A ti que te parece?).
- Aprovecha las ocasiones en las que el niño disfruta
contigo para hablar con él, juega con él, léele cuentos, dibuja...
- Realiza actividades con el niño, sobre todo aquellas que
estimulen el lenguaje espontáneo.
- Elige una actividad que al niño le resulte motivante y
atractiva para que ésta provoque el lenguaje del niño.
- Compórtate
de forma “novata” con el niño, es decir, pídele que te explique las cosas que
esta viendo, el juego con el que esta jugando,... con el fin de conseguir
compartir cosas con él.
- Después de hacer una actividad interesante para el niño,
como viajes, cumpleaños, excursiones... comenta con él todo lo que ha ocurrido,
háblale de ese acontecimiento, que te cuente lo que ha pasado, etc.
- Utiliza preguntas abiertas. Anímale a contestarte con
algo más que si o no. Amplia
sus mensaje.
- Háblale de personas, hechos y lugares que estén presentes
en el contexto en el que habitualmente
se encuentra el niño. Situaciones de aquí y
ahora.
- Hacer
collages con recortes de revistas e inventarse historias o cuentos.
- Dramatización- expresión corporal de cuentos.
- Jugar a inventar historias con marionetas
- Contar cosas de forma ordenada: que ha hecho antes y
después, que hará enseguida, luego...
- Ir explicando dónde se dejan las cosas, trabajando
hábitos de orden.
- Preguntarle a menudo por sus juegos y escuchar las explicaciones.
- Jugar a adivinar objetos nombrando solo algunas
características
- Mirar con él cuentos y revistas y que diga los nombres de
los objetos que aparecen en las imágenes.
- Contarle cuentos haciéndole partícipe, pidiéndole ayuda en algún momento y haciéndole preguntas.
-
Hacerle preguntas sobre cosas que ocurren en su vida
cotidiana para desarrollarle la capacidad de
atención.
- Enseñarle
canciones, adivinanzas, refranes,...
- Ver con él/ella un programa infantil de TV y preguntarle
por el, sobre los personajes, como se llaman, que hacían...
- Buscar diferencias entre los dibujos casi iguales.
- Jugar al “Veo veo”
- Saber
su dirección completa.
- · Que aprenda a recordar su nombre, apellidos, fecha de
cumpleaños, profesión de los padres...
- Juega con el niño ha imitar sonidos del entorno, de
animales o personas, enséñale de donde proceden y anímale a imitarlos.
- Fomenta el juego imaginativo de tu hijo, que juegue a
peinar muñecas, a conducir, a jugar en la granja,...
- Juega con tu hijo a hacer movimientos con los labios,
como hacer morritos, dar besitos, hacer pedorretas...; con la lengua, lamerse
los labios, sacar la lengua fuera de la boca, subirla hasta la nariz...
- El niño puede jugar a soplar molinillos de viento, hacer
burbujas de jabón, soplar pitos, inflar globos...
- Es aconsejable controlar las manifestaciones de ansiedad ya que una situación relajada favorece una
emisión más abundante y fluida.
- Evitar las riñas,
los comentario despectivos o castigos relacionados con el lenguaje
- Permanecer lo
más cerca posible de él/ella cuando se le hable. Ponerse a su altura. Mirarlo directamente a los ojos.
- Eliminar las correcciones del tipo "eso no se dice
así", en su lugar le repetiremos la frase o palabra de forma correcta,
incluso ampliando la misma, por ejemplo, "la tasa es banca"/
"si, la casa es blanca y grande".
- Es importante
felicitar y premiar cada meta alcanzada.
Lo más importante es que padres e hijos disfruten
hablando